La ruta elegida de las 11 que ofrece el parque fue la última a la Laguna de Salobreja. Son 14 km de recorrido circular un tanto decepcionante. La Laguna en el mes de septiembre se ve bastante mermada por la sequía y aunque hasta allí el camino es cómodo a partir de este punto se complica. Seguimos por el cauce seco que parte desde la laguna hasta el bien denominado rio Seco, cuyas aguas al parecer discurren subterráneas durante gran parte del recorrido. Tiene algún interés botánico, la ruta, por contar con especies como sabinas rastreras, enebros y tejos. Pero aparte de esto tengo que decir que pasé mucho calor y no vi un paisaje mejor que el encontré en la parte norte del parque yendo hacia Zaorejas.
Creo que a veces "se sacan" las rutas de donde no las hay con tal de contar con oferta turística para senderistas.
Unos 500 metros antes de llegar al punto donde aparece la carretera surge discreto el rio. En él se puede encontrar alguna truchita y muchas ranas.
Por lo demás, mucho calor, muchos insectos, poca agua y pocas vistas que merecieran la pena.