Muy, muy saludables, las ricas judías verdes con vinagreta de tomate y frutos secos


¡Niña no protestes y cómetelas que son muy sanas!
Esto me decía mi madre cada vez que me ponía en la mesa el plato con las dichosas judías verdes, y tenía razón.
Los conquistadores españoles las trajeron de México y Perú en el siglo XVI. No son otra cosa que las vainas tiernas de las alubias que recogemos cuando se secan. Esto era lo que se comía entonces y no es hasta el siglo XIX cuando se empiezan a consumir en la forma que las conocemos actualmente.

Son ricas en hidratos de carbono, fibra, proteínas, y carecen de grasas por lo que son idóneas en dietas de adelgazamiento. Tal vez de ahí venga su mala fama. Uno siempre piensa que  cuando comes judías verdes o es que estás a dieta o enfermo.

Pero realmente son muy ricas si se las adereza con un poquito de jugosa salsa o se les añade algún complemento como jamón, tomate, etc…
Contienen muchas vitaminas, minerales, ácido fólico (genial para mantener el pelo sano, ahora que en esta temporada se maltrata tanto con los cloros, el mar y el sol), betacaroteno, aminoácidos y antioxidantes. 
Yo las pongo en casa al menos una vez por semana, aunque eso si, cocinadas de diferentes formas.

Hoy os acerco aquí una receta acorde con lo calores que sufrimos. Simplemente aderezadas con una vinagreta de tomate y frutos secos.

Necesitáis para cuatro personas:
  • ·      Medio kilo de judías verdes
  • ·      Dos patataas
  • ·      Dos tomates de ensalada
  • ·      50 grs de nueces
  • ·      50grs de uvas pasas
  • ·      comino molido
  • ·      albahaca (puede valer seca)
  • ·      aceite
  • ·      vinagre de manzana
  • ·      sal


Coced las judías verdes en una olla a fuego medio. Se pueden hacer en la olla rápida pero pierden su bonito color verde y algunas vitaminas. En una olla destapada solo tardan unos 20 minutos en cocerse en agua con sal. También las patatass peladas y partidas en rodajas de un cm de ancho. Cuando la patata esté lista también lo estarán las judías.

¡¡TRUCO!! Yo siempre añado media cebolla junto con las judías por que le aporta un sabor extra que las hace mucho más apetecibles.

PARA LA VINAGRETA.
Pelad los tomates y despepitadlos con cuidado. La pulpa debe quedar entera para adornar el plato.
Utilizaremos la parte dura del tomate que cortaremos en cuadraditos pequeños y formará parte de nuestra vinagreta.
Necesitáis un bol y unas varillas para ir ligando la vinagreta. Echad el vinagre, la sal y el aceite poco a poco mientras removéis.
Añadid el tomate cortado, la albahaca, el comino y rectificad de sal.
Sólo nos faltan las nueces y las pasas cortaditas. Removed todo con cuidado y montad el plato.
Utilizad la pulpa del tomate con un poquito de sal, aceite y pimienta para decorar.
¿qué os parece? ¿fácil verdad?
¿os animaréis a hacerlo uno de estos días?
Me encantaría saber qué tal os ha ido.  Si queréis hacer algún comentario  o tenéis alguna duda estaré encantada de contestaros.


Buen fin de semana!!!

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