Sabores del Mundo: Baklava



Su historia se remonta a la antigua Mesopotamia. Era considerado históricamente como una comida para las clases acomodadas hasta mediados del siglo XIX.
Los griegos trajeron la receta a Atenas y la modificaron cambiando la masa original del Cercano Oriente por una masa filo( de “hojas”). Los armenios agregaron canela y clavo. Y los árabes la hicieron aún más aromática añadiendo agua de rosas y cardamomo.  La receta que hoy os traigo es de herencia árabe y es como se prepara en Oriente Medio.

Necesitas para una bandeja de horno:
  • ·      24 láminas de pasta filo
  • ·      500 grs de Nueces y pistachos o almendras
  • ·      200 grs de azúcar
  • ·      una cucharada de cardamomo en polvo
  • ·      100 grs de mantequilla
  • ·      Agua de rosas
  • ·      Limón


Prepara un almíbar poniendo el doble de azúcar que de agua a consumir al fuego, cuando adquiera cierta densidad añádele un chorrito de agua de rosas. Y una cucharada de zumo de limón.

En un bol junta, el azúcar, las nueces, los pistachos y el cardamomo. Añade un chorrito de agua de rosas, dos cucharadas de mantequilla derretida y revuelve todo hasta que quede bien mezclado.

Ahora sólo tienes que ir impregnando cada hoja de pasta filo por una cara y juntarla con la siguientes así hasta que tengas 12 hojas de pasta. Vierte encima y reparte la mezcla del bol. Extiéndela y sigue poniendo hojas de pasta untadas con mantequilla la primera por las dos caras y el resto por una cara. Cuando llegues a la última con un cuchillo bien afilado corta la preparación en forma de rombos.

Hornea durante media hora a 180 grados. Hasta que esté dorado.
Saca del horno y vierte por encima el almíbar hasta que empape. Puedes adornar con pistachos o almendra picada muy fina.

Os aseguro que es un manjar. Si lo tomas con un buen té creerás que estás en un cuento de las Mil y una noches en la antigua Persia.
¡a disfrutar y soñar!



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